Carta 80 - Te echo de menos, te ansío.

Laura mía,
No sabés cuánto deseo que estés en mis brazos, cuánto deseo amarnos. Ya falta muy poco para verte, y siento muchísima ilusión dentro de mí, como si fuera la primera vez. Voy de acompañante, pero cualquier excusa, cualquier cosa que haga contigo, que compartamos, como siempre te cuento, se convierte en precioso por estar tú y yo. 

Mirá qué acabo de recibir hoy... Cada día una sorpresa... Qué ilusión mi niña estar contigo, haberlo hecho posible juntos, es todo un orgullo. 

Te amo Laura. No sabes cuánto pienso en ti.

Tu Leo.

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Carta 79 - Preciosa, buenos días

Guapa mía,

Buenos días súper princesa. ¿Cómo está mi niña? Mi niña bonita y preciosa que tan fuerte abrazaría ahora... Te quiero Laura. Eres tan pequeñita, tan bonita, tan diminuta que despiertas en mí todos los sentimientos a la vez, tanta ternura y dulzura, tanta alegría, tanta pasión...

Laura, me emociona pensar que en nada podré contemplarte, podré ver tus ojos, cómo me miran, cómo miran al infinito y piensan con una sonrisa preciosa dibujada... Es que me gustas, me encantas.

Laura, espero que tengas un día precioso hoy, llámame cuando quieras siempre, ya lo sabes. ¿Lo harás? Aunque ya mismo lo haré de verdad, me gustaría escuchar tu voz.

Princesa de mis sueños, preciosa de mi corazón, te quiero sirenita.

Tu Leo.

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Carta 78 - Laura, mi bonita

Laura,
Gracias por el correo que me has mandado hoy. Eres muy dulce mi princesa. El cole (como dices tú) ha ido genial, más que nunca, porque tú me lo has deseado, con tanta dulzura siempre.
Ahora estoy comiendo una manzana, y antes de mordela, mientras la sostengo, no puedo evitar imaginarte a ti entre mis manos, entre mis labios, fundida en mí.
Te quiero Laura. Te quiero.

Tu Leo.

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Carta 77 - Laura de mi corazón

Laura de mi corazón, Tengo tus ojos grabados en mi mente. Te veo, siento cómo te abrazo, cómo te abrazaba.
Me ha encantado tu cariño con tu llamada de ahora. Gracias mi Laura por ser tan dulce. No podré resistirme nunca a ti.
Eres bellísima. Estás preciosa. Las palabras sobran más que nunca Laura.
 - Te Quiero -
Tu Leo.

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Carta 76 - Tu sonrisa es un tesoro

Buenos días mi princesa,
Regálame tu sonrisa otra vez Laura. Eres preciosa. Desde hoy hasta me parece sonreír yo mismo mientras te revivo una y otra vez dentro de mi mente, mientras recuerdo qué hermosa es tu sonrisa que me regalaste, como princesita de las flores que eres. Estoy totalmente prendido de ti Laura.
Sirenita adorada y dorada, muchos ánimos para hoy. Todo habrá salido bien, estoy seguro. Aún así, sé fuerte igualmente. Sé que lo eres, pero tú también debes recordarlo.
Laura te quiero. Siéntete libre siempre de contarme todo cuando quieras. Yo te quiero a ti, estoy para ti.
Te quiero con todo mi corazón, sirenita de mis sueños.

Tu Leo.

Carta 75 - Dulce mía

Laurita de mi corazón,

Recién leo tus correos que me enviaste esta semana que he estado fuera. Tú eres dulce. Tú eres una flor, y eres la más bonita, la más dulce y la más brillante. Eres la princesita de todas las demás.

Gracias por estar ahí el miércoles, por estar conmigo. También me parece mentira haberte podido ver. Siempre me parece mentira cuando te veo, porque deseo siempre estar contigo y compartir tantas cosas.

Niña mía, para muchos la chica más guapa que han visto antes de su muerte por desnucamiento, para otros todo el equipo que tengo a mis espaldas de la película de la que hemos hablado, y para mí, también una dulce y preciosa flor, te quiero.

Tu Leo.

Carta 74 - Te quiero

Laura...
 
  ~ T·E Q·U·I·E·R·O ~

Tu Leo. 

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Carta 73 -

Buenos días también para ti

Princesa,

Buenos días preciosa mía. Gracias por escribirme ayer y compartir tantas sensaciones que tan bien me has sabido transmitir con tus palabras. Sé qué sentiste, ambos lo sabemos, porque ambos nos conocemos y sabemos que tenemos una sensibilidad especial, o almenos nosotros sabemos valorarla. Eres pequeña, y no sabes cuánto me encantaría poder compartir tantos momentos contigo, y me volvieras a contar qué sensaciones te vienen con la brisa, qué recuerdas, qué sientes, y poder abrazarte y darte mi cariño a tu lado. Me gustaría que compartieras siempre que lo sientas todo lo que quieras conmigo, que me cuentes como "hoy" tantas sensaciones y las compartas.

Me alegro que te gustaran las fotos. Como dices, yo también me he imaginado cuándo me llamabas, por qué sitios estaba entonces, y las fotos tomadas justo antes o después de hablar contigo y quererte. Cuando me dijiste que querías soñar conmigo el primer día, fui yo quién soñé claramente contigo. Soñé que podía ir a verte, pero estaba lejos, aunque estábamos juntos a la vez... Es rara la vida, sí. Raro soy yo, alguien que sabe que te quiere y que eres lo más importante para mí, que eres lo primero en lo que pienso siempre, que estás cada segundo del día en mi cabeza, pensando cómo estar contigo... Y en cambio, tan lejos que estoy de ti. Quiero estar contigo y abrazarte bien fuerte Laura. En el sueño te decía que eres mi princesita pequeña, seguro.

Mi Laura, yo te echo de menos también. Siempre. Aunque demasiadas veces procuro no sólo no decírtelo, sino además no pensar. Dices que miraste el video que me regalaste, que me encanta por ser un regalo precioso que salió directo de tu corazón. Yo también miro muchas veces algunas fotos tuyas, las pocas que tengo, puestas todas juntas en una carpeta especial. Necesito besarte.

Princesa de todas las flores, espero que hayas soñado conmigo, como yo lo he hecho contigo. No sabes cómo me encanta que te pegues a mí.

Laura, mi vida eres tú. Te quiero.

Tu Leo.

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Carta 72 -


Buenos días princesita. Buenos días niña mía,

Éste no es sólo "otro correo más de buenos días". Cada escrito que te envío por la mañana es una manera de decirte que te quiero, de darte un beso de buenos días, de darte un abrazo.

Eres la persona a la que quiero, y necesito darte mi cariño y sentir que estoy cerca de ti. Desearía estar a tu lado para poder acariciarte y besarte, para poder demostrarte que te quiero otro día más, y que te quiero aún más que ayer pero no más que mañana.

Eres mi princesita pequeña, a la que le haría todos los gustos.

Te amo Laura.

Tu Leo. 

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Carta 71 -

Laurita de mis sueños,

Hoy te volví a soñar y muy clarito. Cómo te quería, y cómo te deseaba. Nos amábamos en cualquier sitio, y hacíamos de alguna manera que la gente de alrededor no se diera cuenta, cuantos besos me regalaste en sueños...

Gracias por tu correo de ayer pequeña. ¿Te gustó la foto? ¿A que es curiosa? Algo me decía que te iba a gustar. Gracias siempre por hacerme todos los gustos y decirme tantas cosas bonitas que sólo tú te mereces. Tú eres preciosa y guapísima, y todo el Mundo se queda embobado contigo, hasta los chicos universitarios de ayer, y algún chico universitario hace más de 5 años... Éste último se quedó enamorado para siempre. Iba a decir "hasta hoy", pero sé que hoy, mañana, y pasado, y el otro, todos los días desearé estar pegado a ti como nunca.

Sí parece que esté mirando algo con ternura, seguramente te miraba a ti, pero es imposible que fueras de 8 centímetros. Quizás algo menos que la mitad, 3 cm. Sí nos lo pasamos muy bien, reímos mucho, como siempre. ¿Ves un papelito encima de mi teclado grande? ¿Uno rosado que parece ser el típico con anotaciones? Pues bien, todo lo que hay ahí es una nota que tomé yo de una frase de José, que le salió directamente del alma. Algo así como "¡No voy a borrar nada con lo que me ha costado!"... Es que nos pasamos algo así como 3 horas para poner todo a punto... No sabés cómo me reí.

¿Cómo pasó la noche la pequeña querida? ¿Has podido descansar bien? Espero que sí. Laura mía, que tengas un súper día hoy.

Un beso muy fuerte para ti mi Laura.

Tu Leo.

PD: Por cierto, me apalizaron ayer al ping-pong...

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Carta 70 -

Mi Laurita,

Evidentemente, en el pack que te puse están todas las fotos (no te lo dije en el anterior mail).

Laura, no sé cómo hacer para no derretirme. Te tengo tan presente, mi niña, que no hago más que pensar en estar a tu lado, contigo, y poder abrazarte.

Te amo.

Tu Leo.

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Carta 69 -

Laura de mi corazón,

Te quiero y te amo. Eres la bolita más pequeña y la princesa más dulce que existe. Eres tan guapa... Estoy prendidito de ti mi Laura.

Espero que hayas pasado una noche muy buena, no haya hecho tanto calor, y que hayas descansado. Estoy seguro que esta noche sí pudiste descansar un poquito más. Ya me contarás, ¿Sí?

Tú eres mi muñeca, mi pequeña, y siempre desearé que estés entre mis manos, en mis brazos, mordiéndote tu cinturita de mazapán...

Te amo.

Tu Leo.

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Carta 68 -

Laura mía,

Gracias, mil gracias siempre por tus palabras, las que yo quiero que son las tuyas. Esto que hago lo hago para ti, y recibir tu cariño es lo más bonito que pueda desear.

Cómo me he reído pequeña. Es verdad, me preguntaba qué habías soñado, y cuando te leí, sonreí muchísimo (en silencio). Me ha encantado la aclaración formulada con un "PERO" que le viene como anillo al dedo. Fijate:

-"Estabamos en una cama grande PERO charlando y vestidos"...

Podríamos estar analizando esta frase durante semanas, y no pararíamos de encontrar detalles que son tan reales, que son tan verdaderas, que nos costaría dejar de reír a las carcajadas.

Reconozco esa sensación de paz, es la misma que siento al estar contigo, protegiéndote con mis brazos, y sintiendo el calor de tu cuerpo contra el mío. Mi corazón es y será siempre tuyo Laura. Mi preciosa Laura.

Te quiero con todo mi corazón.

Tu Leo.

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Carta 67 -

Laura, preciosa mía,

Me gustas tú y me encantas. La temperatura sube cuando estamos juntos, es una explosión de sentimientos y sensaciones, y es único. Es lo más bonito y preciosa del Mundo.

Buenos días mi preciosísima. Ya casi nos veremos, no falta nada. Espero que hoy también descansaras bien. Estoy seguro que la pequeña aún se sentirá mejor hoy. Ya me lo contarás.

Niña preciosa, sirenita de mi corazón, no sabes cuánto deseo amarte, que te sientas amada, que te entregues y te dejes llevar por el cariño que te quiero dar, que deseo darte con toda mi pasión.

Laura, te amo.

Tu Leo.

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Carta 66 -

¿Te lo dije?

Te quero mi Laura.

Tu Leo.


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Carta 65 -

Guapísima de mi corazón,

Gracias por escribirme y decirme tantas cosas bonitas siempre. Cómo no voy a decírtelo, almenos, todo lo que siento por ti y todo lo que deseo acariciarte y amarte... Besarte absolutamente toda. Quiero que te sientas una princesa amada por todos costados, porque eres una princesa. Eres mi princesa, y siempre lo serás. Mi muñeca, mi saltarina, mi sirenita... Mi pasión.

Gracias, mil gracias por compartir tus trabajos conmigo, y por regalármelos. Me encanta que lo compartas, mientras estás con la pequeñita. Está genial. Además, me lo hace hasta con el tamaño correcto... Es que es comible...

 ¿Sabes Laura? Este color es más romántico que el de ayer, aunque no pierda intimidad el de ayer, por parecer algo más oscuro o cerrado. ¿Quién está detrás de las letras? ¿Me lo contarás?

El contraste de colores me encanta, y quizá "comercialmente" se "vería" o "vendería" más éste último diseño que el de ayer. Pero quizá el de ayer vaya más conmigo ... Cuantos más trabajos bonitos haya, más difícil decidir... Ais...

Cosa que no me pasa contigo. Primero, porque no hay más princesas que tú, y segundo porque eres preciosa, eres incluso incomparable... Y decidido estoy... A amarte con pasión, dulzura y ternura.

Te amo.

Tu Leo.

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Carta 64 -

Laura dorada,

Me vuelves loco. Estoy loco por ti. No tengo solución... Mi solución eres tú. Sólo con imaginarte... me derrito. No puedo decirte en palabras lo que me haces sentir... Sólo haría...

Laura mía, no te preocupes por las faltas de ortografía que perpetraste, porque eso es cosa burocrática... Ya sabes, lo de saldar facturas y todo eso. Es cosa de otro departamento con el que tendré la oportunidad de hablar pronto, y que ya mañana podrán ejecutar sus medidas... (jeje)

Preciosa de mi corazón, los colores están genial, creo que me costaría ver todas las diferencias que tú sabes ver. Creo que me has contado otras veces lo de los "pantones" (que no pantalones... hmmm...), y que es muy difícil de conciliar con las diferentes pantallas, monitores, impresoras, etc.

 Ahora lo hiciste todo "mate", supongo que para ver el resultado y también comparar los colores. Como diseño final lo veo quizá algo pretencioso, muy "minimalista", pero no lo descarto, sólo es la primera impresión. Muchísimas gracias por el trabajo que siempre pasas para hacerme todos los gustos. Estoy súper orgulloso de haberme enamorado de la persona con más sensibilidad para todo, para crear, para amar, para ser, para vivir de todo el Mundo y del Universo.

 ¡Ah! Y por cierto, ese "claro" tuyo, tampoco quedará así. Lo añado a la lista de quejas para su sanción oportuna bien pronto...

Un beso en tus labios Laura. Te amo. Tu Leo.

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Carta 63 -

Laura,

Buenas nochas (jeje).

Laura. Muchas gracias por el día de hoy, un día maravilloso que me has vuelto a regalar. Un día para recordar, y si llega el día que no logremos recordarlo todo, no pasa nada, cada uno de los detalles, hasta los más pequeños e inadvertidos han quedado grabados en nosotros, sólo nosotros, tú y yo. Lo que vivimos es único, y nos acompañará con nosotros para siempre.

Te siento conmigo Laura. Amarte es lo más maravilloso del Mundo, lo más bonito que me pueda pasar. Lo que siento por ti es indescriptible. Lo que siento por ti es inmenso, y es para siempre. Y sé que tú también sientes lo mismo. Ha sido todo muy especial, como siempre y como nunca a la vez. Estar a tu lado, abrazarte en el metro, contarte qué significa tu nombre.

Laura, que me encanta amarte, reírte con ese rotundo "no" que hizo que perdieras las fuerzas al subir tu cabecita con la esperanza que sacara mi brazo... Tantas y tantas cosas, que aunque tuvimos poco tiempo para estar juntos, bastan sólo algunos segundos para que describir en palabras todo cuanto sentimos sea imposible. Laura , te quiero con todo mi corazón. Espero que descanses y pases muy buenas nochas. Estoy contigo siempre.

Tu Leo.

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Carta 62 -

No puedo más que decirte que te amo.

Te amo como nunca. Siempre renace, se renueva, crece el amor que siento por ti. Lo que me une a ti, lo que mantiene mi cuerpo con el tuyo. Necesito siempre el tacto de tu piel, de tus labios, tu sabor, tu aroma. Formas parte indivisible de mí, en cuerpo y alma.

Laura , te quiero.

Tu Leo. 

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Carta 61 -

Laura de mi corazón...

Buenos días mi saltarina... me ha encantado tu correo. Te siento pegada a mí y te abrazo. Necesito también abrazarte y tenerte en mis brazos. Eres tan pequeña, me sé tu cuerpo de memoria, siento hasta tu aroma ahora mismo, el tacto de tu piel, tan suave... Me muero por ti, siempre.

Todos mis besitos para ti, niña mía. Mi cabeza no para de dar vueltas y mi corazón sólo hace que desear estar a tu lado.

Te quiero Laura.

Tu Leo.

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Carta 60 -

Preciosa mía,

Recién llegamos, como siempre nos lo pasamos muy bien. Aunque sean tonterías, ir a buscar agua, cualquier cosa, yo lo paso bien con ellos. Mañana ya estaré solo hasta el jueves día 5 de agosto, dentro de 2 semanas.

Hemos escuchado tu disco en el coche. No sabes cuánto he pensado en ti, más si cabe. Recuerdo todos los "viajes" que hacía a donde vivías, tan cerca de mí, para verte.

Laura, pienso tanto en ti... Te echo de menos yo también. Estoy prendido de ti, totalmente. Cada paso que das, cada gesto, cada beso, cada suspiro, es para mí el mejor regalo, es lo que yo más ansío, más amo. Eres mi princesa, y quiero darte todo mi cariño, siempre. Estar contigo, abrazarte, tenerte delante, verte, que me regales tu mirada, tan preciosa, es lo más maravilloso que pueda vivir. Me has regalado tanto, me regalas tanto Laura...

Tú eres lo que yo quiero, a quién yo quiero. Eres un tesoro, eres mi tesoro. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, eres lo más importante para mí. No hay nada más, eres tú. Te quiero a ti, te quiero. Estoy enamorado de ti. Te quiero. Te amo. Hasta tu nombre significa lo más especial en mi vida, que eres tú y el amor que compartimos. Representas todo en mi vida. Representas mi vida Laura. Tú eres mi vida. Me has regalado lo que tanto soñé. Eres mi sueño. Tu nombre podría dar mil vueltas al abecedario, que continuaría teniendo tantos y tantos significados para mí. Eres parte de mí. Mi otra parte. Pasa muy buenas noches. 

Te quiero. Te amo. Te adoro. TE QUIERO. Tu Leo. 

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Carta 59 -

... Por si no te quedaba claro en mi anterior correo:

TE AMO LAURA

Tu Leo, siempre. Siempre significa para siempre, pero también significa cada momento que transcurre, cada segundo. Siempre soy tuyo, para ti. Te quiero.

Carta 58 -

Laura te amo. Quiero estar a solas contigo. Estoy rendido a tus pies.

TE AMO

Tu Leo.

Carta 57 -

Buenas noches, las más bonitas, parece imposible, para el aún mejor día a tu lado.

Cada día es un mejor día. Nunca olvidaré nada a tu lado, y hoy no será por supuesto la excepción. ¡Te quiero! Dos palabras: Te, quiero. Tres: mucho. Cuatro: muchísimo. El amor y todo lo que sentimos el uno por el otro, nisiquiera todo el Mundo puede ni tan sólo imaginarlo.

Tengo tu fragancia, todo sucumbe a tu aroma, cómo te quiero, y deseo estar pegado a ti siempre. Solamente quiero decirte gracias. Graciaspor todo, porque gracias a ti ha sido fantástico, porque siempre me das sorpresas. Siempre estoy en una nube contigo.

Estabas tan guapa. Eres hermosa, y sentirme digno de ti no es fácil, y siempre hace que te cuide y que te respete como chica preciosa que eres. Siempre tengo el sentimiento que nunca debo abusar de mirarte y disfrutar sencillamente de tu exquisita belleza, porque sé que es algo tan bonito, eres tan bonita, que yo no podría mancillarte ni tan sólo con la mirada. Siempre lo sentí así, y así lo siento. Eres mi princesita preciosa, y siempre lo serás. Poder ser yo tu amor, quien te pueda observar y disfrutar de lo guapísima que eres, es el honor más grande. Por esto no quiero abusar nunca de este gran privilegio.

Te quiero muchísimo. Con el corazón y con la cabeza. Como te dije hoy, una cosa sin la otra, en ambos casos, sería insostenible en nuestro caso.

Te amo.

Carta 56 -


Hola mi Laura,

Gracias por tu correo precioso que acabo de leer justo llegar del trabajo. Eres siempre tan dulce, que no praría de comerte. Bueno, en pocas ocasiones paré, ¿Verdad? Qué hermoso todo lo que hemos vivido. Mi amor, lo que hemos vivido permanecerá para siempre en mi corazón, en mi vida. Es lo que me da fuerzas para continuar adelante. Tú me las has dado todo este tiempo, y me las das ahora.

Laura, yo no he cambiado. Continúo saliendo con los amigos, no te preocupes por mí, yo salgo,y continúo tomando el aire como antes. Justamente, no quererte sí sería estar atado. Sí sería bloquear lo que siento. Además, me encantaría estar atado a ti (literalmente).

Tú ya me has dado la razón para seguir adelante, pero como sabemos, falta la tuya para hacer lo mismo. ¿Cuál es tu razón para seguir luchando por lo que quieres? Tienes tantas que hasta no las sabes ver. Empezando por tu familia, tus sueños, y terminando por mí. ¡Y cuántas me dejo por el camino! Por esto quiero repetirte que yo estoy aquí contigo, que continúo luchando por mi vida, por la vida que me has regalado. Te apoyo y te apoyaré en cuanto decidas, y entiendo y respeto lo que me dices. Pero el tesoro del amor que me has regalado y lo que siento por ti no me lo quita nadie. ¿Me entiendes? Nadie. Nisiquiera nosotros mismos.

Sólo hay un aspecto que creo que aún no tienes claro. Laura, no se cómo decírtelo. Quizás deba entrar en tu casa, vestido de militar con una bandera rumana tatuada en el brazo por la noche con un pasamontañas para que te lo creas: Laura, ¡Que te quiero! Por mucho que yo adquiera la cualidad de la poligamia, y esté casado con 10 chicas a la vez, ¡Te quiero! Esto no deja de ser un escrito, pero puedo decírtelo de más formas, pero tanto el truco de la caída a medianoche en la montaña con cadena, como el truco del militar, no serían muy apropiadas para mi bienestar físico. Mi Laura, te  quiero y te querré siempre. Sí, SIEMRPE. ¿No te lo dije continuadamente muchas semanas antes que regresaras? Te querré siempre. Es más te querré siempre, pase lo que pase. ¿Acaso no recuerdas estas palabras mías incluso en escritos? ¿Acaso estás dejando de creerme? Una cosa es lo que te haya pasado a ti con otra persona, o lo que veas por la calle, y otra cosa soy yo. Yo soy especial, ¿O es que tampoco lo soy? ¡Claro que sí! Y sé que lo soy, y sé que me quieres también por ello. Así que, mi chica: TE QUIERO Y TE QUERRÉ SIEMPRE.

Así que como te dije, y como me has pedido, continuaré luchando por mi vida. Y, mi chica, sintiéndolo mucho por ti, esto pasa por hacer que nuestro amor nos lleve a ambos a la felicidad. Y en mi modesta opinión, "ambos" creo que te incluye también a ti, ¿No?

Leo

PD:  Cómo te vivo. Es que de tantas vivencias juntos, creo que si me pusiera a pensar en ranas saltando encima de vacas haciendo el salto en una nave espacial, ¡Seguro que lo relacionaría con nosotros! ... ... ... ... Mi preciosa....

Carta 55 - Mi preciosa piruletita,

Aquí estoy, como te prometí. Son las 23:35, y acabamos de llegar de un largo paseo la Ciudad. Me encanta poder volverlo a vivir
contigo, porque esto es lo que hago y he hecho. Contigo voy siempre, contigo estoy viviendo los días más intensos de mi vida. Tú me haces vivir, me haces sentir, me haces viajar y soñar, me haces amar. Y qué grande y bonito es amarte, Laura. Sólo con pronunciar tu nombre, leerlo (como hoy en el periódico), oírlo, tansiquiera recordarlo, me pone la piel de gallina, se meerizan los pelos, se me remueve todo por dentro. Del sentimiento y de la fuerza con la que siento tu amor, y tus suspiros. Mi Laura, te escribo para sentirte cerca, y así también me sientes tú a mí. Cuántas veces, y yano son veces, sino lrgos momentos seguidos que no he parado de desear que estuvieras allí, conmigo. Por todos esos rincones que sólo contigo puedo compartir, disfrutar, sentir. La melancolía volvió a ser mi compañera de viaje. Siempre le cuento a mi hermana por dónde hemos estado tú y yo, y todas las gracias que me hacías.
Justo después de escribirte esta tarde el correo diciéndote que me iba de paseo, salimos como la vez anterior en coche. Hacemos como yo contigo: En coche por los túneles, hasta la montaña (donde por cierto, ahora ya no encuentro casi aparcamiento.

Esta vez no llegamos hasta la Plaza principal, sino nos quedamos más arriba. Sí sí, justo donde torcíamos con el coche a la derecha cuando te acompañaba a casa... Y hasta abajo. Desde allí arriba. Decidí bajar allí, ya que mi hermana tenía también como yo muchas ganas de pasear. Y como tenía en mente de sorprender a mis padres con 4 entradas para ir al teatro el martes, pues pensé en pasar justo por la sala. Antes nos compramos de todo en una panadería.
.. Imagínate: Pasamos por delante, y digo "hmmmmm... Qué bueno", pero no paré.  Mi hermana me dice seguidamente: "¿Y por qué no te compras algo?". Sólo faltó una mirada cómplice de ambos, que casi no tuvimos tiempo de correr para atrás y arrasar con todo: Palmera de chocolate, donuts de chocolate, donuts normal, donuts sin agujero relleno de... Chocolate, sí, y creo que ya está. No llegamos a la segunda esquina que ya estaba todo desaparecido. La calma, después de la tormenta. Compré las 4 entradas, pero para eso estoy trabajando, como me dices. Te quiero tanto...

Una vez que llegamos a la avenida principal, vimos una heladería (que no era Haagen Dazs ni Farggi), y nos compramos un buen par de tarrinitas de 3 sabores cada una. La mía: maracuyá, piña y canela. La de mi hermana: chocolate con leche, yogourt y mandarina. No estaban mal. Mucho hielo, pero con mucho sabor. Viene a ser como tú, pero en este caso, eres puro calorcito y de sabor infinito. Le iba contanado por dónde habíamos estado en alguna ocasión.

Cruzando la avenida de los cines, y llegando hasta una de nuestras calles hasta le señalé la ventanita en la que nos cobijamos en Farggi
ese día. Bajamos por el barrio donde antes vivías. Bares y restaurantes por todo. ¡Y lo que nos costaba a nosotros encontrar algo! Andando aún (hemos caminado muchísimo, hasta ahora), llegamos hasta la catedral, que tú me enseñaste (tiene gracia, yo nunca fui). Como estábamos cansados, hemos ido a cenar una pizza, adivina dónde. Sí. También le conté que fuimos, y dónde nos comíamos los trocitos de pizza. Allí pensé tanto en ti, que seguro que lo has notado. Hasta mi hermana me miraba, yo estaba embobado. Parece mentira, Laura, qué razón tienes.

Eran las 21:45 y retomamos la marcha... ¡No! No volvimos, sino que continuamos hacia el puerto, pero otra vez desde esos callejones de al lado de la catedral. Justo por donde tú y yo dejábamos revolotear nuestro amor. Llegamos hasta el puerto, y entramos por la zona nuestro primer caramelo compartido en ese banco, ¿Recuerdas?, y mi hermana no paraba de disfrutar con los grandes barcos de lujo allí amarrados. Qué rica brisa marina, y qué fresquita. Dimos la vuelta por detrás (al lado de los muelles, como hicimos tú y yo), y retomamos el camino de vuelta, volviendo por el puente que pasa por encima del mar. Cogimos el metro, ahora ya bastante cansados, hasta la Plaza principal, "y de vuelta, por todo y recién".

Mi amor, estas palabras ni siquiera rozan la superfície de todo lo que he sentido hoy, lo que he sentido contigo cuando nos escribimos, lo que sentí contigo en la ciudad donde nos vimos por primera vez, lo que sentí contigo estos meses, lo que siento ahora, y Dios sabe la fuerza con la que sentiré el día de mañana. Sé que tú lo sientes así también, y también sé que restas importancia a drede al "bichito que se coló en mis fotos", como una persona más que me quiere. Laura, sabemos ambos que lo que hemos vivido, lo que vivimos, y lo que vamos a vivir, será, como mínimo, tan intenso que ya nos llena los corazones con solmente lo que hemos podido compartir. Tú eres mi vida.

Ya son las 0:55. ¿Sabes, mi chica? Cada vez estoy más convencido que alguien nos habla desde allí arriba. Hoy ha sido un día intenso, duro. Trabajé muchas horas, ya sabes, el mediodía fui casi una hora antes, y por la mañana llegué 10 minutos antes. Más de 10 horas hoy. He avanzado mucho en todo. Casi por sorpresa, vinieron de visita (y por negocios) lo mejores clientes de la empresa. Sólo estaba el jefe con ellos, y José, mi tutor y jefe.

.............................................

Hace ya mucho tiempo que sé que me quieres de verdad, que me amas, que estás enamorada de mí. Cuántas cosas bonitas me has dicho que sobrepasan aún de largo mi capacidad para siquiera dimensionar lo inalcanzable de lo maravilloso que me dices. Sé que lo sientes. Yo sé que lo siento también. Nos queremos, y esto es algo que nunca dudaré. Es por esto que te vuelvo a pedir abiertamente que sientas que conmigo no tienes que callarte o esconderme partes de tu vida, porque lo estarías haciendo también de la mía. Yo siento que tú eres mi vida. Te quiero, te quiero, te quiero. No te pido que me cuentes nada, ni que hagas nada. Sólo que sientas. Que sientas que estoy a tu lado. Que estoy contigo.
Quiero a tu vida tanto como a mí mismo. Regálame otra vez tu vida. Haz lo que sientas conmigo. No es difícil. Ambos hemos hecho lo que sentimos juntos.

¿Qué más importante para mí?
Laura, te quiero.

Carta 54 -

Laura
Mi preciosa Laura.Te echo de menos. Es domingo, y ya son las 20:30.

No sabes cómo me gustaría compartir todos nuestros ratos, como esta tarde. Ya casi se está terminando el trabajo que estoy realizando para ti, y estoy seguro que te encantaría poder darme tu opinión sobre la marcha. Si quieres esto allí, eso aquí... Pero bueno, estoy seguro que te gustará igual. Almenos, para recordar ese momento tan maravilloso.

¿Qué habrás hecho hoy? Espero que allá hiciera un día tan bonito como aquí. Aunque hubiera sido realmente hermoso haberlo compartido contigo.

Sólo te escribo para comentarte que ya tengo una carpeta con una selección de fotos preparada. Fotos en las que aparezco yo, tú, y los sitios que me comentaste para hacer alguna composición para la web. Pero no estoy convencido de tu idea. No acabo de entender qué querrías hacer. Yo, por lo menos, me gustaría que saliera un fondo, por ejemplo, con muchos de los ingredientes que lo componen. Tú, yo, el sofá, tu piso, las velas, etc. Por esto, me gustaría que me concretaras qué querrías para la web. Intentaría hacerlo yo, y si me es difícil, te pediría ayuda para ello, ¿Vale?

Sabes que todo esto no es importante. Me importas tú y tu bienestar.

Yo, como ves, me siento más vivo que nunca, y sólo puedo estar mejor a tu lado. Y más sabiendo que tanto me quieres y que mimas mi corazón. Estar cerca de ti es lo máximo que yo pueda sentir, es la plenitud. Por esto, a tu lado lo tengo todo. Contigo, tengo mi corazón.

Te quiero Laura. Te quiero muchísimo. Duerme bien, duerme feliz. Tal como lo hice yo ayer, teniéndote en mi mente, tan cerca.

Fíjate. Tantas cosas para hacer estos días, y ya me faltan otras para ocupar mis horas cuando termine este trabajo. ¿Será que echo de menos darte besititititititos?

Carta 53 -


¡Buenas tardes mi Laura!

Son las 17:30 del domingo. Te vuelvo a escribir porque tengo muchas ganas. Bueno yo desearía poder besarte y quererte, pero es lo máxmimo que se me ocurre ahora. Además te quiero contar cositas, porque te quiero.
 
Bonitísima, Entre ayer y hoy que he hecho un poco de limpieza del PC y ordené un poco las cosas. De todas formas, aún falta, pero poco a poco voy poniendo las cosas en su sitio. De momento, tu segunda carpeta roja se cerró completa. También son regalos de pre-cumpleaños. Aunque me gustaría poder hacértelos en persona, pero te los hago aquí. Así que pronto, cuando nos veamos, tendrás tooooodos tus regalos de tus carpetas de golpe, jejeje.

Bueno, y ahora te preguntarás, almenos, 2 cosas: ¿Se cerró? ¿Con qué?
 
Pues sí. Empezaré por la segunda. Te grabé 2 CDs. Uno contiene toooooodo lo que tengo tuyo hasta ahora: Todos tus mensajes de correo hasta hoy, y todos los míos desde que empecé a guardarlos por ti, fotos que me mandaste desde septiembre, dibujos, todas las fotos de la ciudad que nos vimos por primera vez y muchas cosas más. El segundo CD es de cosas mías: Fotos de aquí, y alguna que otra sorpresa más.

Te dije que cerré la carpeta, porque te acabo de inaugurar la tercera, jeje. Sí, con esos pósters que te dije que recogí hace una semana por mi Ciudad, con alusiones explícitas al túnel y a tu curso... Y también, ahora mismo te he puesto otro CD más en esta tercera carpeta con lo que entregué en el Ayuntamiento con el trabajo.

Y no hace falta que me preguntes qué son las sorpresas, porque para eso están... ¡Para que te las acabe descubriendo ante tu insistencia! Jajajajaja. Bueno, esta vez hablo en serio. ¿Qué? ¿Te ríes? ¿No me tomas en serio? ¿No me tienes respeto? Te estoy hablando seriamente... ¿Me estás diciendo que no me respetas? Yo no me río...

... Creo que ya debería ir pensando en regalarte otra carpeta, la cuarta, porque quiero compartir tantas cosas contigo, que volveré a llenarla seguro.

Te redeseo unos días serenos, tranquilos y a la vez sorprendentes. Te lo mereces. Te mereces lo mejor. Siente desde aquí mis ánimos y mis deseos para ti, porque es lo único que puedo hacer, muy a mi pesar.

Mi amor, toda mi ternura es tuya.

Carta 52 -

Gracias, mi amor, por tus mensajes,

Bueno, me refiero a los mensajes que nunca me has enviado... ¡Que ya van 2 en un día! Jejeje, vaya récord... buuuuuuuuuuuuuu (uuuuuuy qué miedo con tu vocecita de tren...).

..................

Eres mi pequeña, y siempre lo serás. Cómo te adro, mi amor. Cómo te comería mil veces, y más, sin parar.

De verdad, gracias por tus regalos, y por tus ratos conmigo, ni que sea al teléfono o en el correo. Aunque los mejores momentos son durante los que me mimas desde allí, y te siento a mi lado. Yo no paro de hacerlo, mi chica. ¿Sabes? Ahora mismo puse los tíckets en tu carpeta, junto con una copia del escrito que entregué en el Ayuntamiento. Siento que esté en inglés pero es que es mejor así, ¿No? Original. Y si no, pues me enctará traducírtelo, peeeeeeeeeeeeeeeeeeeero: Cuando estés quí, a mi lado, tan cerca (Qué malo). Aunque claro está, creo que los precedentes, mejor dicho, que los innumerables precedentes de situaciones similares a ésta, pues... No dicen nada a favor del objetivo... Nunca se cumplirá... ¡Siempre acabábamos queriéndonos con locura! Y siempre nos faltaba tiempo para todo... Menos... Para nosotros.

Cómo te quiero, y cómo tengo de sincera la sonrisa ahora mismo. Mi piruleta de espiral, te quiero.

Leo. 

Carta 51 -

Laura de mi corazón,

Ya son las 0:00 de la noche sábado-domingo.

¿Sabes? Te echo de menos. Necesito mimarte y besarte. Te quiero a ti, te deseo. Mi Laura cómo adro, sí, adro tu nombre.

He estado mirando nuestras fotos de nuestro viaje a Francia. Qué preciosas son tus fotos, tú las tiraste porque yo no quería. Son maravillosas, se nota que sabes y te gusta. He elegido un par o tres, porque una de ellas será la encargada del fondo que necesito crear.

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No sé qué habrás hecho este fin de semana, pero espero que hayas podido ir a ver la película que comentamos, o al menos puedas ir el fin de semana que viene. Te quiero, ¿Sabes Lauri? Te quiero, y estoy aquí para ti. Desearía estar ahora y todos los días a tu lado, junto a ti. Poder compartir pegaditos mi vida contigo, y saber que a la vez eres feliz. Es algo que no sería imposible lo uno o lo otro, aunque supongo que serán cosas muy difíciles de conseguir ambas a la vez.

Te quiero Laura, te quiero. Me voy a dormir contigo dentro de un rato, a ver si acaba este archivo de subirse. Quiero despertarme a tu lado otra vez, cada día. Quiero que nos amemos cada noche, dormir abrazado a ti, y con mis labios pegaditos a los tuyos. Quiero que nos amemos por la mañana cuando nos despertemos, y desearte los más buenos días.

Quiero que mis ilusiones, que son nuestras ilusiones, se cumplan. Mejor dicho, se continuen cumpliendo. 

Carta 50 -

Buenas noches Laura,

Son las 21:30 casi del domingo.

....................

Por cierto, sobra decirlo, pero que sepas que estuve un buen rato en
nuestro banco. He recordado desde nuestros primeros besos, hasta nuestra primera noche de amor. Creo que ya te conté que dicho banco ya disfruta de una "inscripción" dedicada a ambos. Casualmente se parece horrores a la de otro banco céntrico de tu ciudad ¿Por qué será? Hoy mimé la inscripción, te mimé, te saludé, y te susurré un "hasta pronto". Sé que nos volverá a tener en su falda.

Hablando de cursos, llevo en mi cartera hace millones de años, unos
teléfonos y direcciones que cogí algún día revoloteando la patita por la Ciudad, y que nunca me acuerdo de darte. Y mira que nos hemos visto veces después de marcharte de aquí.

Son de esos pequeños recortes que la gente deja con "punteado" colgado por las paredes, para que las personas interesadas arranquen una de las copias. Cogí 2. Una para ti, y la otra para tu carpeta. Pero ya ves que nunca me acuerdo. Quizá esté demasiado ocupado cuando estoy contigo...

Gracias por tu escrito de hoy. No sabes cuánto me gusta y deseo que te amoldes con tu cabecita de bolita por todos mis rinconcitos. Hmmm... Cuando me lo has contado, lo sentí seguido de un escalofrío. Me encantas.

Un secretito: Me encanta que te pongas tu perfume (que te regalé). Y también aunque no sea de "nuit". De todas formas, el mejor perfume es el tuyo, que siempre deseo. Te quiero Laura. Te quiero mucho.

Tu Leo.

Carta 49 -

Mi ternura suave,

No sabes cómo me reí y cómo me estoy riendo ahora con tus ideas
conspiranóicas... Jajajajaja. De verdad, y todo eso, de una función, de un archivo, de un módulo, de toooooooooooodo el programa... Imagínate lo que te puedes encontrar ahí... ¡Toda una novela codificada! Jajajaja, suerte que lo leí cuando estaba solo en el despacho.

Jajajajaja: "lluvia, llueve, llave: , rezando". No sabes a qué carcajadas reí y río ahora. Mi chica guapa y tercera de sus hermanas... Cómo la adoro.

¿Sabes? Casi todo el programa está escrito por mí.
¡Jajajajaja! Es que lo estoy revolviendo a repasar... "Hexadecimal"
¡Pero qué imaginación tienes! Hasta te veo tus ojitos en la tortuguita que me mandaste. Son los ojitos más despiertos, más sinceros, más creativos e imaginativos, más bellos y más preciosos que los míos han visto jamás.

Jejejejejeje, haré que mi chica de 15 años (recién cumplidos) haga todo lo que desee conmigo en su laboratorio... Se lo tiene bien
merecido por llevar al descubierto este entramado conspiracionista contra el gobierno del país. ¿Seré yo la "tecnología" que va a utilizar en él? Secretito: Nunca podré resistirme a usted ni a sus encantos.

Mi Laura, sé que todo lo que venga de mí lo mimas y lo saboreas, tal como hago yo con todo lo que tenga tu aroma. Sé que te has querido perder entre tanto mensaje y lenguaje secreto, y sé que me veías. Además, está todo sssssshhhhhheno de comentarios míos para que la lectura pueda seguirse un poco más cómodamente. Y estoy seguro que queda algún vestigio de tonterías o peleas mías con esta máquina, y ahí las dejé, para el recuerdo. Raquel lo empezó a escribir a finales de los 80. Imagínate. Lleva la huella nuestra. Y estoy seguro que tú sabrás qué es mío y qué no. Bueno, casi todo es mío. Toooooooodo lo de las carpetas, de arriba a abajo, lo es. Fíjate, lo que hay detrás, es ese proyecto que tuve que hacerme las fórmulas y estudiar los conceptos, mientras estabas conmigo en mi Ciudad. También hice contigo el otro proyecto. Porque recuerda que has estado conmigo en los momentos más importantes de mi vida. Cuando acabé las clases, y me puse con los proyectos, cuando empecé a trabajar, cuando me enseñaste qué es el amor... Te adro (jeje)

ajajajajaja, "dejando viento, sacando chissssssssssssspas del suelo al
caminar"... Jajajajajaja. Dime, mi Laura ¿Me prometes que cuando nos veamos, podré disfrutar de tu voz diciendo "chissssssspas"? Me muero por besarte tus labios cuando pronuncien esa palabra.

Me encantó el bichito que me has enviado Laura "100 y algo de kb no más". Sólo ocupa 23kB... Ya de por sí, hasta brilla, pero ¡Yo la quiero a más calidad! ¿Te dije que eres tú la que está ahí dibujada, estudiada, moldeada, modelada, extruída, renderizzzada y texturizzzada... Sobretodo modelada... Hmmm... Lo que más me ha hecho sonreír al verte en ese JPG, es ver cómo reflejas a tu bichito en la lentejita de hierbita a través de la que pasea. Me encantan las florecitas que llevan tu nombre. La verdad, no sé por qué has firmado la creación, si pone tu nombre en cada color y en cada expresión... ¡Y por cierto! ¡Espero que hayas modelado cada una de esa flores! ¡¿... O es que habrás hecho más trampas?! Me gusta mucho Lauri, sus ojitos, sus colorcitos, su gorra del revés... La miro a ella y te veo a ti. Me gustaría que me la mandases a más calidad, ¿Vale?

Te quiero Laura. Eres mi princesita simpática, divertida, femenina y
coqueta. Mi maravilla de chica.

Sr. Leo (su mejor alumno y conejillo de indias).

PD: Pinta su laboratorio con el color de nuestro deseo, con acabados de tonalidades de nuestra pasión, detalles de su sonriente ternura, y pinceladas del su más cálido y puro amor.

Carta 48 -

Hola bonita de mi corazón,

Espero que pronto te vaya bien Internet. Verás que te han llegado
mishhooooooones de mensajes míos, y los tendrás que leer. Lo siento, pero siempre tengo ganas de contarte lo que siento por ti. Sé que tú también.

Estos días me estoy despertando cada mañana, un poco antes. Y sin
despertador. Mi cabecita me pide estar contigo, y en la cama mi cabecita da vueltas sola. Siempre me vienen imágenes de tu preciosa Ciudad y que tú estás allí, paseando no sé cómo. Pero soy un poco tontito, porque a esa hora nadie pasea por nuestra Plaza. Aunque ya te digo, delego las culpas a mi cabecita, porque piensa por mí. Mi corazón te echa de menos, y sabe mandar bien para que te recuerde.

No paro de ver mi camino hacia tu Ciudad y el de vuelta. Tanto yendo, como volviendo escuché entero el Cd que tanto nos gusta, y ahora todas las canciones me recuerdan a partes del camino. Por ejemplo, la peor de todas (que no está mal), es la que me hace ver esoscampos cerca de mi tierra. Y por esto, esta otra que empieza por la B..... por haberla escuchado de camino, y por haberla compartido contigo aquí, me la estoy aprendiendo para que la disfrutemos juntos.

Necesito que no sufras. Estoy aquí, contigo. Por favor, no pierdas la
confianza para decirme todo, y asegurame que no dejas de estar bien. Eres lo que más me importa. Aceptaré todo de ti, y estaré contigo, aunque te exprese lo que pienso. Te quiero, quiero lo mejor para ti. Aceptaré hacer todo por ti, aunque creas que quizás me haga daño. Recuerda que fui yo quien insistió que no nos llamáramos, y que tampoco nos escribiéramos. Soy yo el que está aprendiendo, y necesito que continúes enseñándome. Me enseñas cada día qué es el amor. Enséñame a quererte mejor. Enséñame otra vez a ser digno de ti, y continuaré siendo feliz.

Eres tan guapa... Hasta pronto mi dulce piruleta.

Te quiero muchísimo. A ti. 

Carta 47 -

¡Hola mi Lauri!

Buenos súper días preciosísima princesita. ¡Sí! Ya sé que me dirás:

¿Cómo que "prescccciosssssísssssima"?  (jeje) A ver si te tendré que hacer como tú con el sintetizzzador... Jejeje, ¿Verdad? Seguro que me lo dirías. Hmmm, pues ya deseo que me lo digas, y que yo te lo tenga que decir sin equivocarme, y que me equivoque muuuuuchas veces... Muuuuuchas... Y que el castigo sea cada vez un beso tuyo, tan preciado, tan deseado...

Acabo de leer y releer tu carta que me escribistes de madrugada. Es preciosa la carta. ¿Sabes? Esta mañana mi padre me dijo, mientras tomaba mi chocolate (puaj, yo quiero mi Laura (Voz de niño pequeño - Pato)), "¡Qué bien te lo has pasado esta noche! Y yo pregunté: ¿Cómo? Y él dice: "¡No paraste de reír!" Pues sí, Laura. Se ve que soñaba y reía mucho. Y mirá tú, que sí recuerdo qué soñé a trocitos, y no recuerdo que hiciera gracia (exámenes en la Universidad, visitas en casa, pero no recuerdo más). Y hoy me encuentro con tu correo, mientras yo dormía plácidamente. Me estabas mimando y besando. He sentido ahora mientras te disfrutaba en tu correo todos tus besos, todas tus palabras que me dicen que me quieren mientras me besas, como si estuviéramos uno delante del otro... Pero qué digo, uno pegado al otro, sin querer nada más que estrujarnos y arrimarnos cada vez más fuerte uno contra el otro.

Cómo lo recuerdo con igual ternura cuando hemos vividos tantísimos momentos, días noches, uno al lado del otro, cómo me encanta y me encandila que me hables y me digas que me quieres, y me beses al mismo tiempo, que yo te bese mientras me lo dices, que te robe tus palabras y tus sonrisas, que suspires cuando lo hago, que yo suspire cuando me acaricias y siento tus labios allá donde me mimen, donde me besen. Me encanta sentirte, deseo sentirte como me decías anoche ya mismo conmigo, tus labios contra los míos, aunque te pinche, nunca me doy cuenta. Deseo sentir cómo me acaricias mis labios, cómo nos mimamos a besitos, cómo nos damos cariño y nos besamos sin parar. Nunca pararía, te deseo, te súper deseo.

Te agradezco mi amor que a pesar de las inclemencias de tu ordenador, que no para de hacer el tonto, me hayas podido escribir. Sé que te habrás estado mil horas, esperando una y otra vez que se apague el ordenador, y se vuelva a encender, y a cargar. Volverte a conectar, y volver a retomar la escritura. Te súper quiero, gracias por mimarme, pero igual sé que me mimas tanto y tanto. Yo también te mimo y te deseo acariciar para decirte cuánto te quiero, y cuánto deseo que te sientas lo mejor posible, feliz, como la princesita de mis cuentos de hadas. Te pido que no pases ratos con esto,

¿Vale?

Gracias por escribirme y mimarme, aunque tú digas que yo te mimo mucho, eres tú la que me hace sentir tan bien, a pesar de las distancias. Me ha hecho mucha ilusión leerte, y te he sentido, como en esta noche, tan cerca y te he podido ver tan clarito cuando me decías que me quieres y me besabas a la vez, que no puedo parar de suspirar ahora. Contigo al lado nunca puedo parar. No quiero parar. Nunca quiero parar.

Eres mi chica, y te quiero muchísimo. Hasta pronto.

Carta 46 -

Buenas noches, mi bonita,

Y digo buenas, aunque no me gusta que se acabe hoy el día... ¡Ayer no acabó!

El cansancio parece esconderse, y sólo tengo ganas de quererte, y de decirte que eres una persona maravillosa y excepcional. No sabes lo orgulloso que me siento de haber conocido a la hermosura más bella que se precie, en todos los sentidos.

Voy a esperar un rato más tu llamada. Espero que Isa y tú estéis

fenomenal. Me alegra muchísimo saber que estás con ella.

Hasta ahora por teléfono.

Carta 45 -

Mi preciosa Laura,

Son las 21:00, y ya hace mucho rato que te dije que iría a descansar.

Pero es que entonces no habría tenido tiempo para revivirte más y más en mi cabecita. Te quiero muchísimo Laura.

 Estuve en el sofá viendo una serie que me grabé el miércoles, porque sí me fui a dormir para el grandioso jueves, haciéndote caso. Volví hacia aquí arriba y encendí el ordenador. Y aquí me tienes, para mimarte siempre. Ya sea por correo, por móvil, o por lo que sea. Que sepas que siempre deseo y siempre te mimaré de verdad cuando te tenga delante. Siempre. Siempre que lo desees, te acariciaré con mis besos, con todo mi amor. Porque así lo siento. Así que no me digas "gracias", porque yo así lo deseo. No hago ningún esfuerzo. El esfuerzo que sí hacemos ambos (a veces), es contra la picardía de la naturaleza cuando nos entregamos el uno al otro, porque tú y yo nos atraemos y nos queremos sincera y verdaderamente.

 No puedo dejar de mimarte. Seguramente estarás paseando y tomando algo con tus amigos o conocidos. Mi corazón feliz, se enternece con tu felicidad sabiendo que almenos estás bien, estás cuidada, estás sonriendo aunque no esté yo cerca. Como hago yo, con la sonrisa que le has regalado a mi afortunada vida. La fortuna que me has regalado, y mi regalas día a día.

Te he escrito algunos correos hoy, como ves. No pases mal para escribirme, no te lo tendría que decir a estas alturas, pero insisto. Te escribo porque puedo, y siento que debo hacerlo. Algo debo hacer para compartir mi amor, que es sólo tuyo. No para de brotar en mí, y necesito dártelo todo, como si fueran nuestros besos. Tú no te preocupes, porque esto lo haces con sólo sonreír allá donde estés.

Porque tu mirada y tu sonrisa son lo más valioso. Que vayan siempre juntas. Que nunca se acaben. Que no tengas nunca que decir que te llamas Laura, porque tus ojos tiernos hayan dejado de sonreír.

Mi amor siempre para ti.

Leo.

PD: NOTA: Durante el transcurso de la realización de este escrito, no se ha maltratado ni un solo pellizco de amor. Todo ha sido vertido para llenar el corazón de/la destinatario/a. Pero el autor destaca que el brotar continuo del mismo no se puede parar, y por ende, lo almacenará para posteriores oportunidades de acercarse a su corazón señorita, y amarla de la forma más tierna que se merezca la más bella de las princesas allí donde esté.

Carta 44 - Hola otra vez!

Laurita, bonita. Tengo que volver a escribirte, no paré en todo el
rato de pensarlo. ¿Sabes por qué? Pues porque con mi hermana, volvimos a ver esta tarde una película genial. Y te veía todo el rato. No sé si te gustarán como a mi este tipo de comedias, de esos años, Se llama "El Guateque" y es del año 1964, de Blake Edwards y el protagonista es Peter Sellers. Por esto te animo a que la veas, si es en compañía mejor. De veras, te soy muy sincero, es una película encantadora, de buen gusto, y elegante, en todos los sentidos. Y te hace pensar sobre la vida, los valores, es explicativa por sí sola, y además, te ríes un montón por el humor inteligente y de buen gusto que rebosa por todas partes. Es el típico patoso que por accidente, se ve invitado a una fiesta de etiqueta. Lo demás, imagínate.

Laura, te he visto en todo. Me he imaginado contigo, volviéndote a "enseñar" a jugar al "pool". Me encanta enseñarte, porque estamos tan juntitos... En la película hay un momento que se ve una situación similar. Cómo deseo volver a jugar al "pool" contigo, y que me pidas que te enseñe, y abrazarte y poner mi cabecita pegadita a la tuya, mirando las bolas, a tu izquierda. Te quiero mi amor.

Me gustaría expresar lo que siento, después de volver a disfrutar de la película, que en todo momento la compartí contigo, y que por esto, te vuelvo a pedir que la veas y te rías, y la disfrutes. Pensé en ti, porque sé que valoras los detalles y el buen hacer de las personas. La ternura, la elegancia, como tú. Te recordé y quiero que recuerdes conmigo cuando la veas, la forma de vestir, los peinados, esas caritas de las chicas tan finas, aunque no fueran jóvenes, la manera de actuar de los varones, la forma y el protocolo en el que seguían esos actos. Mi amor, hay una escena que el protagonista y una chica que le acompaña un señor no muy agradable, se miran. Él le sonríe (es un trozo de pan), y ella también, pero enseguida aparta la mirada, hacia abajo, y mueve la cabecita como haciéndose la chica, la femenina, coqueteando. Pero qué precioso todo. Te vi a ti, mi amor. Te vi a ti. Y no sabes cómo lo sentí. Es que, Laura, cómo me atrapa tu forma de ser, y vivir lo que tú y yo siempre soñamos.

Sobretodo te he visto en una escena, en la que él quiere ir al WC imperativamente, y se ve envuelto en la escucha de esta chica que te comento, que tocaba con la guitarra una canción preciosa, en la que todos los invitados estaban pendientes. Y claro, él no podía ser menos, y por modales, tuvo que aguantarse (pobrecito) y esperar a que acabara la canción. Qué mal lo pasó. Pero bueno, a lo que iba. En estas películas se primaba el buen gusto, y por tanto se le daba la importancia que se merecía la escena. Pues bien, ella toca la guitarra y canta en directo. Canta con una voz preciosa, de esas finas y muy bien logradas, y abajo sale subtitulado lo que dice la letra. Habla sobre el amor, sobre los sueños. Los sueños que nos construímos, y lo que seríamos con o sin ellos. No dura más de un par de minutos, pero es preciosa. Quiero que la escuches, que la disfrutes conmigo. Lo que dice es muy bonito, y Laura, créeme, habla de nosotros.

Quiero que veas esta película. Alquilala, pasa un buen rato. Es que deseo que lo hagas, y si puede ser para celebrar tu cumpleaños, mejor. Me encantaría, mi chica.

Siento si te aburrí, pero es que necesitaba compartirlo, porque así lo hice, como sé que tú compartes también conmigo tu vida. La película es preciosa, tal como lo eres tú, y lo es nuestro amor. Así sentí nuestro cariño, así lo siento ahora, y lo sentiré para siempre. Incluso lo que vivo ahora contigo es precioso. Y poder compartirlo contigo es el mejor regalo que me pudieras hacer en todos mis pre-cumpleaños, cumpleaños, y post-cumpleaños.

Leo

PD: Por cierto, mi princesita de caramelo, en tus CDs también están las fotos de nuestro viaje a Francia, el llamado "De Todo 2006". Un saludo de túnel: "Desesperacioooooooooooon... Penummmmmmmbras.... destruccioooooooooon" (hhhhhhmmmmmmmmmmmmm me encantaría que me atraparas...) A ver. :"Destrucccccccccccssssssssioooooooooooooooooooooooonnnnnn). Jejejeje, mi Laura, ¡Hasta ya!

Carta 43 -

Laura

Puse las fotos para ti, como habrás supuesto (por eso también las explicaciones están en español).

Justamente también lo hice para que vieras en forma de imágenes que la vida me continúa sonriendo desde que me entregaste tu amor, desde que te di mi corazón, desde que te quiero. Aprovecho para disculparme si al final no puse lo que te había dicho que pondría. Te garantizo que lo reflexioné muchísimo.

Comprenderás que la única razón es por tu bien, y para que no tengas ni una sola preocupación más por mí. Tus trabajos también los llevo siempre conmigo y tus carpetas no paran de criar y de multiplicarse.

No me escribas, por favor. No hace falta escribirnos para saber que nos llevamos cada día allá donde vamos. Ahora sé que estás bien, y no voy a responder a más correos tuyos mientras estés con tu familia, a no ser que me lo pidas. Estoy deseando que me cuentes todo con calma, ya sea si estás cerca, o cuando te vaya a ver dentro de algún tiempo, cuando todo pase. Y sé que la sorpresa que les has dado ha debido ser magnífica. La que me hicistes esa noche  "la primera vez que nos vimos" fue maravillosa.

Desde entonces, cada día a tu lado es una sorpresa continua y una preciadísima maravilla.

Carta 42 -

Hola preciosa,

Es jueves, y son las 20:10. Quería contarte cositas, porque así me siento un poquito más cerca de ti. Como cuando nos podemos ver sólo importa nuestro amor, y yo sólo te deseo a ti, pues pensé que mejor contarte, por ejemplo, cómo me va el trabajo y esas cosas tan poco trascendentes. Yo te súper quiero a ti, y no sabes cómo deseo estar contigo. No paramos de decírnoslo, ya lo sé, pero es que almenos tú, mi amor, sí quiero que lo sepas: Te quiero, y siempre me haces feliz.

En el trabajo continúo estando genial. Tengo suerte también en esto. Ya ves que a parte de la primavera, me has llevado también la suerte. Sobretodo la suerte de conocerte, de saber que existes, de darme cuenta que todas mis ilusiones desde pequeño se resuelven contigo. A tu lado, dándote mi amor, soy tan feliz... Ahora tenemos mucho mucho trabajo, sobretodo por la época. Siempre en verano todos los clientes aprietan mucho. Yo tengo ahora no sólo un proyecto abierto, sino creo que como 4 o 5... Todos empezados, y yendo para adelante, aunque claro, lentos porque no doy más de mí. Están muy contentos conmigo. Estoy dedicándome a una instalación (lo hago todo).

La cuestión es que me da igual el dinero, pero al menos deseo sentirme correspondido. Pero depende de cómo vayan las cosas, yo también me propondría muchas metas, y me gustaría y tengo muchas ganas de experimentar, así que ya veré. Lo único que sé es que te quiero. Te súper quiero, y siempre te deseo. No sabes cómo me gustaría poder tomar estas decisiones a tu lado. No sabes cómo me gustaría hacer todo a tu lado. Deseo sufrir este calor contigo, que nos abrasemos pegaditos (y nos abrasemos....Digo abracemos...).

Laura eres mi princesita. Siempre quiero estar contigo para amarnos.

Leo

Carta 41 -

¡Hola mi Laura

Me gustas tú, y no me hagas hablar más aún, si no quieres que te coma a mordijjjjco limpio. Me gusta todo de ti.

Espero que todo haya quedado bien aclarado. Stop.

Tenga usted una buena tarde. Stop.

... Te quiero mi chica. Eres todo el amor que una persona ni siquiera pueda desear. Espero saberte corresponder como siempre te has merecido. Te quiero. Y como me has escrito tú como si me hablaras (así lo imaginé, tal como lo deseabas), te susurro: Te a-mo, te de-se-o, y te amaría ahora mismo, y te mimaría cada minuto de nuestras vidas.

Carta 40 -

Hola mi súper Lauri

Ya son las 23:15 del viernes, y acabamos de llegar de otro paseo maravilloso por nuestros sitios. Esta vez, fui con mi hermano pequeño, que le encanta acompañarme.
Paseé todo el rato contigo. Desde Plaza, hasta nuestro portal, donde me fijé si habían nuevas pintadas, pero sorprendentemente no las hay. Nuestro piso continúa tan bonito como siempre lo ha sido, pero no tanto como cuando estabas tú. Te echo de menos Laura. No he parado de vivirte otra vez. Qué suerte tengo que tendré siempre aquí a mi Laura, nuestra vida, mi vida. Esta ciudad es nuestra, y me hablará por siempre de ti.

Y yo espero estar siempre por tu ciudad aunque sólo esté en algún banco, en alguna plaza, en algún parque, en algún pueblecito... Te quiero Laura Te quiero y estoy a tu lado. Tengo y continuaré teniendo toda mi ilusión por y para ti. Te adro (jeje), te deseo y por el viaje en tren hasta la montaña de vuelta, no paré de recordar nuestros primeros momentos de emoción cuando nos empezamos a besar en nuestra habitación del pueblo Incluso le volví a decir a mi hermano que me dejar "volar" (así literalmente), porque cerré los ojos en señal de sueño, pero pensaba y viajaba contigo, hasta a ti. Fuimos después por tu antigüo barrio hasta el mar, como siempre. Comimos algo en el McDonalds (también de mi Laura y de su hermanita -las dos-). De vuelta al tren, subimos como siempre por nuestro "Pizza Hut", pero esta vez por las callejuelas del barrio del centro.

Laura estás conmigo. Te quiero a mi lado, te quiero besar Laura.
Te quiero abrazar, te quiero mimar, acariciar. Pero como no puedo hacerlo como quisiera, quiero que sepas al menos que te súper quiero, y siempre te tengo aquí delante, con tu sonrisa, con tu mirada, a la que echo muchísimo de menos también.
Soy alguien orgulloso de haber entregado su corazón a la chica más guapa y simpática del Mundo.

Mañana intentaré mini-prepararme la presentación, porque el lunes después de trabajar quedé con José para hacer un simulacro, y hacerle yo la presentación a él, para pulir cosas. Te lo cuento para que sepas que haré cositas, aunque yo quiero estar contigo, a tu lado. Antes de irme esta tarde, estuve solo un buen rato, y escuché 2 discos de tu música preferida en tu honor. Quiero besarte Laura.

Te quiero.

Leo

Carta 39 -

Hola delicia de mi corazón,

¿O sea que quieres que me esconda de ti y de la Doctora? ¡Pues que sepas que no lo pienso hacer, porque yo soy muy fuerte, y además yo tengo un Laborat... Un... ... ... Eso. Jopelines. Otra vez metí la pata... «Me pregunto cómo se resiste esta Doctora en detenerme y torturarme, con tantas veces que me he equivocado... ¡Ay! Pero si estoy diciendo en voz alta lo que no debería...» (Y la Doctora se preguntará cómo Leo hizo las «» sin acudir a "Insertar Símbolo").

Mi Laura, gracias por tu sonrisa en tu último correo. Pero sepas que sólo me creeré la tuya de verdad, cuando tenga la dicha de verla a menos de 10 cm de mí mientras se acerca para besarme.

Te quiero, mi princesita pequeña de caramelo, te quiero. Feliz día 30 de Septiembre para ti también. Si hubiera algo nuestro, como pareja de enamorados de ensueño que somos como mínimo, que merece ser personalizado y distinguido a alguien de los dos en concreto, esto es el día de mañana, hace un año, y a ti. Gracias, mi Laura de mi corazón, GRACIAS por regalarme mi propia vida y por darme tanto amor. Gracias por obsequiarme tu corazón y ser tan valiente y honrada a la vez, gracias por querer vivir tu vida, y renunciar a creer que los sueños no existen. Sí existen, mi chica. Mi sueño eres tu amor, tú eres mi amor. Te quiero muchísimo, Laura, Iluminaste mi vida, y así continúas haciéndolo. Y no se acabarán los días para que la ilumines para siempre. Laura, toma nota de lo que hicistes. Siente esa fuerza que TODOS tenemos y debemos usar para vivir, siente esa voluntad para ser feliz otra vez. Debes creer otra vez en ti misma, y luchar tanto como lo hiciste mañana hará un año, y como así lo has hecho todo este tiempo.

No has dejado de demostrarme que, a parte de ser la persona que quiero y deseo cada segundo que pasa, eres una chica muy honrada, y la persona más noble que he conocido jamás. No puedo ni sufrir ahora pensar cómo te mientes a ti misma acusándote injustamente de no ser así. Tienes el corazón más bello, el que yo amo. Antes creía que tenías un gran corazón. Ahora sé que, además, sólo te faltan unas alas para ser un ángel.

Carta 38 -

Mi Laura,

Yo también te veo siempre en tantos sitios... Sé lo que sentiste, porque yo también lo he sentido, y muchas veces. Saber que disfrutamos, reímos, y nos apasionamos con cualquiera que sea nuestra situación o actividad es maravilloso. Gracias, mi amor, gracias por compartirlo conmigo.

Estoy seguro que hacerlo así te ha hecho sentir un poquito mejor. Cuídate muchísimo. Los nervios muy probablemente ofrezcan una ayuda totalmente inestimable a lo que te hace sufrir del estómago. Yo creo que quizás deberías calmar tu ser, sin oprimir tus sentimientos con tanta fuerza. Ni tragar tus sentimientos es necesario, ni llevarlos a flor de piel tampoco lo es. Solamente no los oprimas. Llora cuando así lo sientas, desahógate cuando así lo sientas. ¿Te acuerdas? En nuestro piso te ahogaste con el "¡Qué!" (jajajaja). Nuestra tarde en tu ciudad ... también te desahogó.

Yo mismo, mi Laura te pido que no me guardes la exclusiva con eso. Ojalá pudiera estar cada uno de los minutos de mi vida contigo, a tu lado, para quererte y poder darte todo mi cariño para que cures tu preciosa vida que nunca se mereció una sola pena ni una sola lágrima.

Mi corazón encontró la paz contigo. Haré todo porque el tuyo la encuentre también. Sé que me conoces, y no pensarás que te digo esto para que "cuentes las penas a otro". Sólo quiero que estés mimada y cuidada, y yo desde aquí no puedo hacer todo lo necesario. Por esto, a la vez, te pido también que te sientas

libre de hablar conmigo y pedirme LO QUE SEA para aliviar tu persona. Eres lo primero en mi vida, es lo que dio forma a mis pensamientos desde el primer día de este mes de reflexión, y es lo que continuo sintiendo ahora, después de darme todo tu cariño y amor estos días. Sé que yo para ti también soy alguien especial. El amor de tu vida está y estará siempre a tu lado.

Así que no me hagas enojar, y no quiero encontrarme con desastres como: "No hablo ni cuento nada para no preocupar a nadie", o "Sólo hablaré con Leo porque es el único que me quiere y cuida", o "Sólo hablaré con los demás para no preocupar a Leo ¿LO has entendido. ¡Cómo te quiero! En resumen: Siéntete totalmente libre conmigo, y de contarme y pedirme LO QUE HAGA FALTA.

Mi amor. Son las 19:30 y dentro de un rato llegarán los amigos. Esta
semana tocó quedar el viernes. Me gusta más, porque así me queda libre la noche del sábado.

Laura, mi chica deliciosa tres veces: Te quiero con todo mi corazón.
Gracias por compartir lo que sientes. Vamos a divertirnos y a disfrutar de la vida tan pronto que no nos habremos dado cuenta. Son etapas de la vida. Sé que vamos a escuchar juntos tu "Ave María" en algún momento muy importante para nosotros dos. Aunque eso sí, espero que no sea durante una carrera con motos de agua...

Carta 37 - Mi Laurita,

Jusssssto "resién" (jeje) acabamos de ver los 2 DVD que música que nos regalaron. Sólo te puedes ver de cara esa vez que te comento, junto con mi hermana pero tú no te reconoces, porque la imagen está emborronada (sólo se ve lo del primer plano). Por desgracia mía, no te puedes reconocer, a no ser que alguien sepa que estabas allí tan cerca de un chico alto... Como yo. Cómo te súper quiero. Al segundo DVD, se despiden, y hacen 2 vises, ¿Recuerdas? Justo cuando se van para volver a entrar al cabo de un rato, yo me fui a por bebidas. 

Fuiste como siempre tan respetuosa que ni siquiera en el vídeo, sabiéndolo, puedo ver objetivamente que te hice daño. Me ha vuelto a doler como ese día, pero créeme Laura si ahora no me preocupo por ello, es porque esto, al lado del hecho de no poder verte, es la gloria. Es algo de juguete, aunque me duela horrores, como otras muchas cosas que te he hecho sufrir por ser como soy, bueno, espero que "como era" mejor dicho. Siempre llego tarde, me cuesta, soy cortito. Pero te garantizo que siempre acabo aprendiendo. Y a tu lado aprender, a parte de ser un honor, es lo más bonito que pueda vivir, aunque a veces muy triste por haberte hecho tanto daño. Pero te quiero, sabes que te quiero, quiero que sepas que te súper quiero. 

Te echo de menos, mi Laura. Yo no me voy a preocupar por tonterías como siempre me dices. Pero yo sé lo que son tonterías y lo que no. Y algo que no lo es, es que te deseo, te quiero, te adoro. Eres mi chica, eres mi ternura. Nunca más permitiré hacerte daño. Nunca permitiré que sufras por niñeces de criatura estúpida, porque te quiero. Te quiero, te quiero, y te deseo lo mejor del Mundo. Sé que estás en el vídeo porque te viví, y sé que te hice daño porque lo viví. En cambio, tu lo embelleces todo, nadie se dio cuenta, nisiquiera yo otra vez, de otras muchas tantas. 

Yo debo mejorar muchísimo. Lo he hecho contigo aquí en mi ciudad y lo estoy haciendo contigo ahora que estás en tu casa. Y lo continuaré haciendo a tu lado, porque mi chica, no voy a permitir tampoco perder una ilusión, que es estar contigo, a tu lado, allá donde estemos. Porque por lejos que te parezca que quieres o debes estar, yo siempre estaré allí, contigo. Yo quiero continuar viviéndote. Te deseo, y eres mi chica. Tú eres lo más importante. Te quiero, ¿Sabes? Con todas las letras. Por lo tanto, estate segura que, por lo mínimo, seremos cómplices toda la vida y nos querremos siempre. Tienes mi corazón, y no puedo vivir sin él. Por favor, quédatelo y desea quedártelo y cuidarlo siempre, porque prefiero dar la vida por ti y que seas feliz con él, que me lo devolvieras y sufrir el tormento que supondría no poder vivir sin tu amor y tu ternura. Porque eres mi ternura, ¿Lo sabés? 
Leo

Carta 36 -

Buenas noches, mi princesita.

Hemos ido a nuestro supermercado, pues allí mismo volvimos a encontrar mis croissanes, y volvimos a comprar dos cajas, aún teniendo precedente de barriguitas a punto de estallar de la otra vez. Pero no están tan buenos como el Super de mi Lauri y si los encontráramos allí, no estarían tan buenos como si me los regalaras otra vez tú. Pero no estarían tan buenos, ni cualquier chocolate dulce, como tú. Tú eres mi dulzura y mi chica exquisita, mi comida y mis mimos.

Fuimos a tomar algo en esas terracitas de esa calle de nuestra zona... ¿Soy concreto, eh? Sí, mi chica. ¿Te acuerdas de ese tecito en ese bar con música que nos gusta? Pues casi delante. Allí estuvimos largo rato, hasta las 21:00. Charlamos sobre los proyectos  de carrera. Nos dirigimos al tren, y nos despedimos. Te vi por todas partes, toda esta "Ciudad" es tuya, es nuestra. Y te siento a mi lado siempre, siempre. Aunque te deseo siempre igual o más, porque eres mi chica, y todos los mimos y afecto que te pueda dar, siempre será poco para mi princesita preciosa.

Pues ya estamos todos aquí, durmiendo, menos yo. Yo que quiero estar contigo, que deseo siempre tenerte conmigo, cuanto más cerca mejor. Pero tan cerca, que estuvieras pegadita a mí, y nunca te dejaría marchar. Tendríamos que ir por la calle pegaditos, y siempre juntitos... Hmmmmmm...

Te quería contar también que estoy haciendo un "regalo" para ti... Bueno para ti y para unos conocidos nuestros, pero esto ya es confidencial. ¡Sí, sí! Estoy sacando muchas ideas, creo que ya tengo las necesarias (aunque no sé si las suficientes). Todo de bolita y sólo para ti (y para compañeros de andanzas nuestros). Sólo tú sabes sacar lo mejor de mí, y ya me ves, haciendo esto para ti, aunque al final no te guste, siempre tengo ideas que me vienen con mis vivencias. Y mi vida eres tú, mi Laura. Sé que les encuentras a todos mis trabajos alguna parte de mí. Espero que sepas hacerlo igual, cuando encuentres los trocitos de cuello que debes tener aún en tu posesión... Hmmmm... ¿Querés más?

Te súper quiero, y te echo mucho de menos. Gracias por ser mi bolita, por ser mi edredón, por ser la princesita a la que deseo amar día y noche, noche y día, mañana y tarde, al amanecer y de madrugada... Y...

Y...

Carta 35 -

Mi delicia, 

Es un poco tarde, acabo de llegar de echar unas risas con mis amigos. Si escribo mal por no hacer ruído, sin "aes", por favor discúlpame. Sé que tú lo vas a hacer, pero también sé que a mi pesar, la profesora no (jeje).. Tampoco te escribiré demasiado, ya que cuando leas esto, o sea ahora (qué tontería, claro que es ahora, ¿Verdad?), Te tengo en mi mente. 

No me cansaré de repetirte que es maravilloso poder mimar y sentir en mi naricita el contorno de tu cara, la suavidad de tu pelo, a la vez que observo tu sonrisa y tus ojos de paz y bienestar, cuando estamos uno al lado del otro, sin preocupaciones. Bueno, siempre las hay, pero creo que hemos sabido aprender más o menos a saber disfrutar del hecho de haber estado juntos. Despertarme a tu lado. Besarte. Laura siéntate y párate a pensar sólo 5 minutos. Es realmente fantástico y extraordinario lo que hemos vivido, lo que vivimos. Lo mejor que le puede pasar a una persona es descubrir el amor. Y no sólo me ha ocurrido esto, sinó que me han brotado sensaciones y despertado sentimientos nuevos que no hubiera imaginado. 

Me has enseñado tantas cosas, me has permitido vivir tan intensamente, tan naturalmente, que parece que sienta como si me liberaras de mí mismo y sacaras lo mejor de mí. Y no sabes lo orgulloso que estoy de poder hacerlo contigo, y a tu lado. A tu lado estaré siempre. Sabes, esto no sólo no se olvida, sinó que además quedará siempre marcado en mis recuerdos como la Razón por la que seguir adelante con nuestra vida, y por la que uno lucha día a día. Es todo inexplicablemente dulce contigo. 

Mi delicia, mi ternura. Antes podía decir quererte, y ahora puedo decirte que te quiero con el corazón. Creo que siempre habrán cabos sueltos en nuestras vidas. Como en la de todos. Pero cuando nos vayamos a interrogar a nosotros mismos, ante nuestros miedos, tendremos sólo que remitirnos a esa Razón.

Carta 33 -

Laura 

Quiero y rezo para que te sientas lo mejor posible. Me gustaría que te sintieras tranquila, yo no te pediré nada que no puedas hacer. Sólo quiero insistir en que tú y yo somos una pareja que calzamos muy bien (en todos los sentidos), y nos sentimos plenos y felices cuando estamos uno al lado del otro. Quiero estar a tu lado, quiero estar junto a ti. Quiero ayudarte, tal como lo haces siempre tú conmigo. Aunque sé que tú misma puedes superar lo que venga con los ojos cerrados, estando a tu lado te mimaría en cada momento, y compartiríamos todo y nos ayudaríamos mutuamente en lo que haga falta, y no podemos cerrar los ojos ante esto. 

Obviamente, todo lo que hemos hablado está en pie, y una cosa no quita la otra. Estoy aquí, para lo que quieras, contigo. Conmigo, siéntete tan libre como siempre y más. Pídeme lo que sea, aunque creas que no me pueda gustar lo que oiga (ya sé que es difícil hacerlo porque me "enojo un poco de bolita", pero sabes que no imposible). Aunque quieras no mantener comunicación durante un tiempo. Lo que sea. Lo que sientas. Eso sí, yo también tendré algo que decir. 

Jejeje. Pensarás: "Qué bien, ¿No? Yo diré negro, y Leo dirá: Vale, blanco, perfecto". Te quiero. Me siento tuyo, contigo. Somos dos, somos una pareja. Estamos enamorados, y nos importamos mucho. Lo que sientes tú, lo siento yo; y lo que siento yo, lo sientes tú. Igual que hacer el amor contigo. Así que sí, si es necesario, lo diré.

Te quiero con todo mi corazón, aunque sé que mi corazón está revoloteando contigo mientras rodeas tu precioso jardín.

Carta 32 -



¡Mi amor!

Al final voy a ver al profe el miércoles. Entonces el jueves lo aprovecharé para ir a llevar el CD. En teoría debe enviarse por correo. Pero aunque no puedo ir por la mañana a la oficina de correos, también es un tontería no entregarlo en mano.

Hoy ya hice la última clase a Ana. No sé por qué he ido, ya se lo sabe todo... Qué cosas, ¿Eh? Mi madre igual. Todo el día fuera, para "cuidar" adolescentes que no son sus hijos. Y yo, a dar clases particulares a personas que no se llaman Laura.
 
Te quiero, mi princesita de perfecto color de caramelo. Estoy escuchando el CD. Me gusta mucho, ¿Eh? Sobretodo desde que me dijiste que te gustaba tanto.

Que vaya muy bien, mi Laurita. Un beso, y dos, y tres, y...

Carta 30 -

Hola mi Laurita, 

Acabo de llegar, son las 20:45. Vi que me llamaste, pero recién llegué a esa hora al despacho de Jose. Sé que no lo estás pasando bien, pero es que nos queremos. Almenos yo, no puedo hacer más. No puedo negar que me gustas y que te quiero con todo mi corazón. Siempre estaré a tu lado, cerca de ti. Siempre. Pero es que te deseo, y te quiero. 

Laura. siempre estoy contigo. Desde que te conozco, todo es más bonito, toda mi ilusión desborda, y no paro de hacer cosas porque te quiero. Me encanta tu ciudad, y me encantará vivir en ella. No paro de verte y desear estar pegado a ti, mi chica. Te quiero muchísimo, y no sé cómo hacer para que seas feliz. Yo no lo sería sin mi amor por ti. Por eso te dije que prefiero que te quedes mi corazón, aunque no lo quisieras, porque te pertenece a ti. Todo lo que hago es para ti, pronto tendré un papel más, me quiero mover para mimarte, quiero colaborar con todo lo que tenga que ver contigo, con tu ciudad, con bolitas (jeje). En definitiva, te quiero Laura. 

Mañana martes voy a una cena con el grupo. Es el cumpleaños de José. Hoy por la tarde, tansiquiera pudiste hablar conmigo para desearme que me fuera bien. Y yo mañana, iré a un cumpleaños de vete tú a saber quién. Cómo cambiaría todo para estar contigo ahora, mañana, y siempre. Qué rabia me da que no sea tan fácil como me ha sido todo siempre de poder ESTAR CONTIGO, que es lo que realmente me importa. Lo demás, es tan prescindible... Pero como te digo, cada cosa que hago, aunque nisiquiera no se parezca ni un ápice al estar sencillamente contigo, que es lo que deseo, la hago celebrando que te quiero, que nos queremos, y que la ilusión de estar juntos, por recóndita que a veces pueda parecer, no está tan alejada. 

Una cosa está clara, yo nunca me alejaré de ti. Así que, aunque vueles alto y rápido como un patito, o te escondas entre los túneles, siempre estaré contigo para mimarte. 

Leo 

PD: Óbviamente, el simulacro ha ido muy bien. Presenté dentro de tiempo, y con apenas fallos ¿O con quién creías estar hablando? ¿O queriendo...? ¿O mimando ... ..?

Carta 29 -

Princesita bonita,

No hay día que pase que no desee que estés en mis brazos. Comparto todo lo que me dices. En cambio, cuando yo veo a una pareja, nos veo a los dos.

No sé por qué vuelvo a saltarme mi palabra, pero por ti dejo hacer lo que me dicta el corazón, aunque lo haga a través de "wireless", y ahora en concreto a larga distancia. Me ha gustado muchísimo recibir tu correo, tanto como el primero.

Te quiero Laura, te quiero mucho.

Carta 28 -

Hola Laurita

Te leí antes de recién salir esta tarde del trabajo. Ya casi está terminado el documento definitivo... Mañana a ver si hay suerte y lo acabo.

Tú sí que eres mi dulce bombón de caramelo. Nunca, nunca me cansaré de comerte y saborearte, porque me encantan los dulces, ¿Sabes? ¿O no lo sabías?

Hmmm... Mármol... Creo que ya sé qué tartas son. Me siento tan bien, mi Laura Qué regalo me hicistes... Cada instante de tu vida es un regalo para mí. Y qué regalo me has hecho ahora. Me dices que saboreas también por mí tu pastelito. Me encanta que me acompañes y comas cositas de chocolate (a mí, personalmente, me gusta comer cositas de caramelo... No, no me has entendio. ¿Acaso no me tomas en serio? ¿Me respetas? (jeje) No me entendiste... Me gusta comer y besar toooooodo mi caramelito preferido. Mi único caramelo: tú). Sobretodo me has hecho feliz... ¡Porque así me has dado pie a que yo también meriende! Jajaja.

Me das una immensa felicidad, mi Laura. Saber que estás viviendo me hace feliz, muy feliz. Te quiero, mi bomboncito. Eres mi ternura, que te llevo en mí siempre. Estás por mi cabecita revoloteando por todo, como cuando me seduces y me bailas, y saltas. Eres mi pequeña princesa. Mi princesita.

Mi amor, me diste celos(de veras), y ahora pues mira, me subí súper chocolate, y súper galletas marbú (las únicas que menos me desagradan), y me voy a pegar una merienda... ¡Ala, que no me sé resistir al chocolete!

(Secretito: Cada día me resisto a merendar, hago una excepción para acompañarte. Aunque eso sí, tú eres irresistible, y no puedo dejar de caer rendido a tus brazos, a tus pies, porque me derrites, mi chica... Y esta sensación es indescriptible... Pero tan bonita... Hmmm... ¡Besititos!).

Leo.

Carta 27 -

Buenos súper días mi Laurita, 

Ya es sábado, y son las 10:30 de la mañana, justo me levanté hace un ratito. Encendí este Word para empezar a escribirte como lo hago ahora, pero antes de hacerlo, me puse a observar tus fotos aquí colgadas. Esta habitación nunca estuvo tan bella antes. Y no tan sólo por las fotos, sino porque ayer tú estuviste aquí y lo embelleciste todo con tus "spikes" de bolita. 

Mirándote, he estado un buen rato recordando cómo estuvimos ayer tan juntos y no dejo de estremecerme aquí de pie, recordando las imágenes que no paran de aparecerse en mi cabecita, y que sí son realmente una preciosa lluvia rosada para mi corazón. Han sido dos días maravillosos. Los días más felices de mi vida no paran de acontecerse uno detrás de otro, como si alguien que me ama quisiera a toda costa que yo fuera feliz. Y ese alguien eres tú indudablemente. 

Sin más, me viniste a ver, hiciste lo imposible otra vez por tan sólo estar a mi lado en un momento en mi carrera significativo, pero que tan sólo tú hiciste que se conviertiera nuevamente en el más importante y feliz de mi vida. Cuando me felicitabas en tantas ocasiones estos dos días, estabas plenamente en lo cierto mi amor. La enhorabuena que poseo es por estar contigo, a tu lado, queriéndonos. Yo no he hecho nada. Mis felicidades fueron sencillamente el estar contigo y querernos de verdad, en la máxima expresión, paseando, abrazándonos, mirándonos en la montaña con esa complicidad, coqueteándome, ... Todo mi Laura. Por todo ello, sí me podías bien decir: felicidades. 

Al despedirnos, me hicistes gestos de "mis dos Matrículas de Honor", en el Corte. Y yo te hice otros gestos, diciéndote que sólo tú eres mi única Matrícula de Honor, y que te llevo siempre en mi corazón, aunque lo tengas tú. Digamos entonces que tú estás en el huequecito que ocupaba antes mi corazón, que ya es tuyo desde hace mucho tiempo. 

Cuando te vi en el momento de la deliberación del tribunal, viajé hasta una nube disparado. ¡Qué sorpresa! Te fui a abrazar y besar como lo hubiera hecho en cualquier circunstancia, dado el momento. Estaba tan nervioso, tenía todo lo que necesitaba a menos de 2 metros de mí. ¡Estuviste cuando me pusieron la nota! ¡La máxima puntuación! Y tú estabas allí. Te miraba de reojo. ¿Cómo lo haces para ser tan tierna, para estar siempre a mi lado, como me decías en tu último correo antes de partir hacia acá? Estuviste conmigo. Desde entonces, hasta hoy mismo no he tenido hambre, sólo el deseo de estar contigo. No comimos casi, antes de ir a mi empresa para dejarlo todo atado (o casi todo, porque las maletas aún están en mi coche). Jejejeje, cómo te observaron tooooooodas (y tooooodos). Eres tan bonita y tan guapa que sería difícil para cualquier persona no sentirse atraído por ti, aunque sea sólo físicamente. 

Nadie sabe, y si lo supiera, nadie se imaginaría cómo nos queremos. Nadie se llegaría a imaginar todo lo que has hecho por mí, todo lo que has sacrificado y luchado. Tú y yo juntos, con nuestro amor, es lo más grande y hermoso que me sucede en mi vida. Queríamos estar juntos, y no sabíamos cómo. Fue maravilloso escaparnos de la gente y del mundo. Fue maravilloso estar a tu lado. Eso deseabamos hacer desde que nos vimos allá en la plaza de mi Universidad. Con las mossssscas y pinchos de las plantas. Cuando decidiste quedarte, otra vez por mí, volví a sentir que el más afortunado del Mundo volvía a ser yo. Ya no daba crédito que todo me sonriera. Que tú me sonrieras. Qué emoción otra vez. Comprando las frutas, brindando con Nesteas, buscando un sitio tranquilo para compartir nuestra pasión y nuestro amor. Con suerte, volvimos a nuestro sitios cómplices. 

Como algunas veces te digo... Sobran las palabras. Nuestras manzanas compartidas. Necesitábamos un mínimo de vitaminas, ¿No? Qué dulce despertar Laura. Qué dulce. Estuviste ayer en mi casa. Qué feliz estaba, compartiendo lo que sentía contigo. Fue muy especial para mí también. Fuiste a la vez la primera persona que vio mis 2 títulos, tal como te dije que así iba a ser. Aunque sólo fue por ti que así pudo ser. Mil gracias por todo mi Laura. Nuestro cafecito y aceitunitas, mientras me contabas lo de las administrativas, qué bien mi Laura. Allí arriba nos quieren, pero como ves, tenemos que poner de nuestra parte también. 

Pero sólo tú pones de tu parte, porque eres tú quién hace posible que mi vida sea tan maravillosa. Te debo toda mi vida. Soy tan feliz... Mi vida es para ti, y siempre estaré a tu lado, así como tú lo estás. Siempre seré feliz, porque te quiero. Tú eres mi amor, y nunca me podrías hacer daño, ni que te lo propusieras. Sé que me quieres, y por tanto es suficiente. Qué ricos nuestros granizados. En nuestra terracita. En nuestro parque. Estaba tan feliz a tu lado... Tan bien y tan cómodo contigo. Fue maravilloso. Cada momento a tu lado es como un regalo que no quiero que se acabe, y nunca lo hace, aunque se parta un poco a lo largo del tiempo. Pero siempre estamos juntos. Fueron otros momentos de paz que nunca se olvidarán. Nuestro centro comercial de esta ciudad, va a ser nuestro para siempre. Para siempre será nuestro amor. 

Gracias por regalarme mi vida. 
Soy tan feliz... 
Te quiero Laura.