miércoles, 31 de agosto de 2011

Carta 13 -

Mi Laurita pequeñísima, 

Recién hemos hablado por teléfono. Me encanta sentirte cerca, aunque es una tentación. Me ha gustado, qué digo gustado, encantado tu correo que me has enviado esta tarde. Recién lo leí y lo releí. Eres mi ternura y mi amor. Me encanta que compartas conmigo las tartas de chocolate que te ofrecen todos... ¡Pero no te vayas a hacer daño! Tú no me las dejes probar, no... Mucho compartir, mucho compartir, ¡Pero yo no como nada! Jejejeje, es bromita mi princesita de caramelito tierno. Yo también te digo un "Hola", cuando subo aquí y te veo en la pared y por todo; al igual que haces tú en las estanterías de chocolate del supermercado. 

¿Sabes? Te lo escribo en otro párrafo, porque también se lo merece. Me encanta tu jardín. Sé que lleva mucho trabajo, pero igual, aunque me dijeras que no estaba cuidado, yo lo vi espléndido. Me quedé embobado porque es precioso y lleva tu nombre. Me encanta que todo a tu alrededor brille, aunque no te debe costar mucho, porque eres tú la de las "spikes" y corazoncitos. Ni una mala hierba, ni ninguna planta que salía de su sitio. Cómo las cuidas, cómo cuidas todo. Me encanta, porque sé cómo me cuidas a mí también, y te quiero por esto y por todo, por como eres, y por cómo me das la felicidad con tu corazón. 

Cuántas cosas hago yo también, y es gracias a la vida que nunca me cansaré de agradecerte que me regalas día sí y día también. Me imaginé también cómo me describías a mí mismo, y efectivamente, así estaría. Apoyado en el marco, y con las piernas y el brazo tan cual dices. Me has dado paz cuando hemos hablado y me has dicho que intentarás divertirte lo más posible, aunque me quieras. Yo no debo ser de ningún modo un obstáculo para tu vida, al contrario. Y por esto no debes sentirte mal o culpable por mí, pasándotelo bien junto a otras personas. No debemos pasarlo mal por no estar acompañados por nosotros. Puedes estar acompañada por compañeros o amigos, y pasarlo bien, y no te digo "desconectando" de todo, sino al contrario: pensando en mí y en cómo disfrutaría yo viéndote sonreír como siempre. Divertirte, sin desconectar, es lo más sano. 

Por esto ahora me he puesto a hacer todo porque me das tranquilidad. Yo sólo quería decírtelo, y así me has dado paz. Sé que recordarás mis palabras, y sé que sonreirás al lado de los que más te quieren. Sino, no sabría encontrar el sentido, al menos yo. Mi vida ya lo tiene, y mi corazón ya tiene su lugar en tu regazo. Sé ahora tú quien me lo continúe cuidando pasándolo lo mejor posible con los tuyos, porque siempre lo tendrás contigo, y te sentiré disfrutar. ¿Tú no me sientes a mí sonreír? Estoy seguro que sí. ¡Hasta por teléfono es evidente! 

Sabes de sobra que hago mil cosas porque me das continuamente fuerzas, aunque la razón para seguir adelante fue suficiente con sólo darnos nuestro corazón, y entregarnos el uno al otro. Me bailas por mi cabecita. Cómo te observo y te disfruto, mi niñísima. Mi "girlfriend" que no delato por protejerla, y en cambio le doy un beso en la Estación de Autobús. Me acompañan todas las ganas de luchar por nuestra vida, por ti, por mí, por todos los que me quieren. 

Qué feliz que me haces, mi Laura. ¡No te duermas! Diría pato... Destrucccccciónnnnnnnnnnnnnnnn... Diría el primo de pato. Hola soy pato... Diría la novia de pato. Me pongo nervioso... De la emoccciónnnnnnn (diría túnel). No puedo parar... Seguro que debo ya tener los ojitos achinados. Me siento tan bien como si supiera que iba a verte esta tarde. 

Mis ojitos grandes, hasta ya. 
Te quiero cada día que pasa como nunca. 
Leo

No hay comentarios:

Publicar un comentario