Carta 25 -
Laura de mi corazón,
Ya es sábado (bueno, domingo). Son las 00:10, y acabo de llegar de cenar con los amigos. Espero que no te hayas puesto tan guapa hoy para cuidar con "producto" a las palmeras. ¡A ver si seduces a alguna de ellas! ¿Sabes? Esta mañana también he estado poniendo orden (aún) a todo esto (mi habitación). Pronto... Pronto sabré dónde exhibir tus... Tus cositas de chica, jejeje.
Cuántos recuerdos tengo tuyos por aquí. Por aquí, y por todo. Hemos ido al "pool", y todo tenía tu fragancia. Perdí, a pesar que no estabas en el equipo contrario, jajajaja. Ay... Mi niña. Incluso mi fondo de escritorio del ordenador me saluda siempre con tu "Hola" y tu dibujo hecho "a mano", en 1 minuto, delante mío, en nuestro piso, ¿Recuerdas? Sí, la "ninia_a_a_n". Qué bellos son tus "hola", y tus "buenos días", cada vez que me mimabas, y me reencontrabas...
Qué genial, qué bonito y qué verdadero y sincero todo. Espero que esto que te envío pueda ser tu "pre-regalo" de "pre-cumpleaños". No sabes cuánta rabia me da no poder hacer nada, pero es así. No te podré ni siquiera felicitar. Pero confío en que desde aquí, notes mi amor y mi afecto. Te quiero, y tú has sido el mayor y mejor regalo de todos los cumpleaños juntos de mi vida. ¡Te quiero! Tengo aquí a mi lado tus palabras y tus dibujos que me regalaste con tanta pasión.
Tus palabras escritas me dan paz, y me miman diciéndome que te apartarías conmigo cada día, en algún rincón. En el otro, me cuidas y me dices que brindaremos siempre. Lo más hermoso, lo que me llevaré ahora a la cama, es que estarás conmigo en cada amanecer, y cuando descanse el Sol. Siempre. Mi preciosa princesita, toma tus mismas palabras también para ti. Yo siempre te querré, pase lo que pase.
Créeme, mi Sol. Te quiero así como eres. Porque eres mi bonita, mi preciosa, mi dama. Eres bellísima, aunque apartes la mirada, como yo. Aunque yo me enfado ¿No? Jeje. Pero claro, yo siempre tengo la razón, y sé que eres maravillosa. Fuiste tú quien me fue ayudando a abrir los ojos, y sé que soy especial, al menos para ti. Con eso me basta. Por favor, siente esto tú también. Te quiero, me gustas, me agradas muchísimo.
Es evidente y normal que te abrumen mil y un pensamientos en estos momentos, antes y después de querernos tanto. Pero que no te eclipsen. Eres tan buena, dando tu ropa (¡Nueva! Con esos armarios tan grandes y estupendos, seguro que escondían tantas cosas...). Me encanta que sigas luchando por tus valores, por tu forma de ser que me cautiva, por tus responsabilidades, tanto de la casa (que es preciosa, porque habla de ti por todo), como las tuyas propias (que no dejes de continuar aprendiendo tanto con tus estudios. Siempre estamos aprendiendo, contínuamente. Todos.
Y estate segura de que las plantas están contentas porque te tienen a ti sonriente. Que nadie te haga olvidar que al menos para mí (y para muchos, aunque no quieras o puedas verlo), sigues siendo la piruleta más simpática, juguetona, risueña, guapa y sexy de todo el Universo (y más allá, ida y vuelta). Justamente en este Mundo, es lo que más falta hace, y lo que no hay. Tu manera de ser cautiva: Tus ojos preciosos te embellecen, y tu mirada achica los corazones ajenos. Disfrutemos de nuestro amor, que nadie nos lo podrá quitar.
Leo
La traición debe ser uno de los dolores más grandes que una persona pueda experimentar, y más aún cuando esa traición se recibe de un ser amado. Descubrir que esa persona en quien se ha confiado plenamente, nada tiene que ver con aquél por quien se hacía pasar, hace que todo aquello que parecía firme e inamovible se desplome ante nuestros ojos, que la tierra se abra bajo nuestros pies, y cayendo irremediablemente al vacío infinito, la angustia oprima el pecho sin dejar el aire pasar.
miércoles, 31 de agosto de 2011
Etiquetas: carta de amor en re menor, carta,
Carta de Amor en Re Menor
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario